El 6 de octubre de 1921 se estrenó la película alemana Las tres luces (Der Müde Tod), dirigida por Fritz Lang. Protagonizada por Lil Dagover, Walter Janssen, Bernhard Goetzke, Rudolf Klein-Rogge, Hans Sternberg, Erich Pabst.
Productora: Decla-Bioscop AG.
Sinopsis argumental: A un pueblecito llega un día un personaje enjuto y con aires siniestros (Bernhard Goetzke), que compra una parcela y construye una casa a la que rodea de un muro tan alto que impide ver que hay al otro lado. Al mismo lugar, poco tiempo después, arriba una joven pareja de enamorados (Lil Dagover y Walter Janssen). El novio no tarda en perecer luego de un fortuito encuentro con este misterioso extraño. La novia, en un acto supremo de amor, decide acabar con su vida, y se topa cara a cara con el Ser, a quien le exige que le devuelva a su enamorado. Este le lleva a un recinto donde le explica que cada ser humano posee una vela y que cuando esta se extingue, ya no hay nada que hacer. Aún así, conmovido por su valor, le ofrece un desafío: Si alguno de las tres parejas de amantes condenados cuyas historias le mostrará, se salva, ella podrá reunirse con su amante.
1- La primera historia, ambientada en el Medio Oriente del Siglo XIX, muestra a un joven americano (Walter Janssen) enamorado de la hija (Lil Dagover) del Califa de Bagdad (Eduard Von Winterstein), que es apresado por las huestes reales y condenado a muerte.
2- En la Venecia del S. XVII, el malvado Girólamo (Rudolf Klein-Rogge) tiende una trampa a su esposa (Lil Dagover), de manera que sea ella quien de muerte a su amante (Walter Janssen).
3- En la China imperial, un mago va de visita a la corte del emperador (Charles Puffy), a quien debe hacer reir aún a costa de su propia cabeza. En la presentación, su Alteza se fija en Tiaotsien (Lil Dagover), la joven asistente del mago, y la exige para sí, aún a despecho del joven novio de esta (Walter Janssen).
Por supuesto, estando la Muerte presente en todas las historias, se puede preveer el final trágico de todas ellas.
Comentario: Lo que no se pudo prever es la amplia influencia que esta película ejerce en la Historia del Cine, no solo en la filmografía del propio Fritz Lang, sino en la de directores tan alejados como en el caso de Ingmar Bergman de El Séptimo Sello (Det Sjunde Inseglet, 1957) o el Robert Gavaldón de Macario (1960).
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