Un delirio de grandeza a pesar de un presupuesto ajustado: el director Brady Corbet movió montañas para este extraordinario fresco. Siete años de trabajo, una armada de productores y vértigo de principio a fin.
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| Adrien Brody interpreta a un arquitecto que sobrevivió al Holocausto y emigró a Estados Unidos, donde le esperan otros sufrimientos |
"Esta película me está matando lentamente." Brady Corbet puede moderar su admisión con una sonrisa, pero debajo de la broma surge una verdad: el cine tiene un precio, que se mide menos en dólares que en tiempo. The Brutalist le costó siete años. El propio interesado nos lo recordó aquel día, por videoconferencia desde Londres y al límite de sus fuerzas, como repite cada vez que le toca un honor –y los premios no dejan de llegar desde el Festival de Venecia de septiembre y su León de Plata al mejor director-. Además de los tres Globos de Oro (mejor director, película dramática y actor en esta categoría para Adrien Brody) recibidos en enero, ha obtenido diez nominaciones a los Oscar.
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