martes, 22 de octubre de 2013

Efemérides de cine: El discreto encanto de la burguesía

El 22 de octubre de 1972 se estrena en París la película El discreto encanto de la burguesía.
El discreto encanto de la burguesía (Le charme discret de la bourgeoisie) es una película francesa dirigida por el realizador español Luis Buñuel (fue la primera vez que un español obtenía tan preciada estatuilla, pero la autoría de película era eminentemente francesa.) y estuvo nominada al Globo de Oro como mejor película extranjera. Interpretada por Fernando Rey, Paul Frankeur, Delphine Seyrig, Jean-Pierre Cassel, Stéphane Audran, Michel Piccoli, Bulle Ogier, Julien Bertheau, Milena Vukotic, Maria Gabriella Maione, Claude Pieplu, Muni, François Maistre, Pierre Maguelon, Maxence Mailfort. 
Como en muchos de los largometrajes que realizó a lo largo de su vida, se pueden observar algunas escenas con características propias del surrealismo. Ganó el Oscar en 1972 a la mejor película extranjera. Buñuel deseaba filmar la película en España, mas no le fue posible por la censura franquista. Considerada una de las obras maestras del cine mundial y una de las más aclamadas del cine de Buñuel.

Rafael Costa (Fernando Rey), embajador de la República de Miranda y el matrimonio Thévenot han sido invitados, junto con la hermana de la esposa, a cenar en casa del matrimonio Sénechal. Pero por error se presentan un día antes, por lo que se impone un cambio de planes... Acuden a un restaurante, pero una vez allí, se enteran de que no podrán cenar porque el dueño del restaurante ha muerto y la capilla ardiente está instalada ahí mismo.

A partir de un esquema sencillo –un grupo de amigos intenta una infinidad de veces sentarse a la mesa para cenar o comer juntos, sin llegar a conseguirlo por razones variopintas– Buñuel lanza cierta crítica a las costumbres de la clase burguesa. Sin embargo, es su film más amable, suavizado por los constantes recursos al humor, lo que explica que fuera uno de los grandes éxitos del director. Las constantes del genio de Calanda están presentes, como el recurso a los sueños (incluso a dos niveles), los gags surrealistas o su especial interés en reírse de la religión. Es necesario aclarar que no se trata tampoco de un film hilarante, como prometía la publicidad. "El cartel es una boca enorme pintada sobre unas piernas, bajo un sombrero hongo. Yo hubiera fusilado al publicista", aclara Buñuel.
La censura franquista eliminó la escena en que el obispo mata a un moribundo, lo que enfada mucho a Buñuel, que decide no volver a hacer cine en España. 
En 1986, Fernando Fernán-Gómez dirige El viaje a ninguna parte, reproduciendo la peculiar imagen repetida de los personajes caminando por una carretera que no lleva a ningún sitio.



No hay comentarios:

Publicar un comentario