El 25 de diciembre de 1945 se estrenó Venganza (Cornered), dirigida por Edward Dmytryk y protagonizada por Dick Powell, Walter Slezak, Micheline Cheirel, Nina Vale, Morris Carnovsky, Edgar Barrier, Steven Geray, Jack La Rue, Gregory Gaye. Productora: RKO Radio Pictures.
Sinopsis argumental: Cuando es desmovilizado al terminar la guerra, el aviador canadiense Laurence Gerard vuelve a Francia para descubrir quién ordenó matar a un grupo de resistentes entre los cuales estaba su novia. Identifica a un colaborador del gobierno de Vichy y le sigue la pista hasta Argentina, donde el nazismo está lejos de haber desaparecido...
Comentario: La historia se basa en un argumento, de gran actualidad en su momento, escrito por John Wexley y Ben Hecht (no acreditado). Focaliza la atención en la amenaza nazi y su vigencia. Jerarcas alemanes y destacados colaboracionistas se trasladan a Sudamérica, en busca de refugio y de nuevas bases de operaciones, ante la proximidad de la derrota del III Reich. Los personajes quedan poco desarrollados en beneficio de la descripción minuciosa de los ambientes oscuros y tenebrosos en los que habitan los criminales. Éstos se amparan en la destrución de pruebas de su identidad y de su pasado y en una densa maraña de chantajes, sobornos, amenzas y asesinatos a sangre fría. El personaje principal, el piloto de aviación canadiense recién licenciado, Laurence Gerard (Dick Powell), se mueve por ansias de vengar la muerte de su esposa, una muchacha francesa de 20 años, con la que compartió 20 días de matrimonio. A causa de la delación de un colaboracionista nazi, en grupo de la Resistencia del que formaba parte la chica, cae víctima de la furia nazi.
De Laurende Gerard se conoce su determinación, inteligencia, impaciencia, capacidad de trabajo en solitario, tenacidad, nacionalidad, edad (34 años), profesión (ingeniero) y poco más. Los procesos internos de su reacción ante la evolución de los acontecimientos quedan fuera del relato. De Melchior Incza (Walter Slezak) se conoce la ambigüedad de sus lealtades y pocas cosas más. Los diálogos tienen gran importancia. Construidos con esmero y fluidez, sobre ellos recae gran parte la explicación de las incidencias que jalonan el desarrollo del relato. La dirección muestra una notable capacidad narrativa y una acertada creación de una atmósfera densa, misteriosa y amenazante, que constituye uno de los principales méritos del film. Combina con habilidad imagen, sonido, diálogos y acción, en orden a dotar la obra de un nivel convincente y absorbente de dramatismo y tensión.
La música, de Roy Webb hace uso de melodías trepidantes de viento y percusión, que crean sentimientos de temor y ansiedad. La fotografía, en blanco y negro, de Harry Wild, se sirve de fuertes contrastes de luz, intensas manchas oscuras, espacios cerrados y siniestros, bien ensamblados y adecuadamente resueltos.
Gran parte del equipo técnico y el actor principal de la obra, habían coincidido meses antes en el rodaje de Historia de un detective (1945). Ambas películas forman parte de las piezas de cine negro más sólidas del Dmytryk.
No hay comentarios:
Publicar un comentario