El 6 de febrero de 1924 se estrenó Paris que duerme (Paris qui dort), dirigida por René Clair y protagonizada por Henri Rollan, Myla Seller, Charles Martinelli, Madeleine Rodrigue, Antoine Stacquet. Producción: Films Diamant.
Sinopsis argumental: El guarda nocturno de la Torre Eiffel, después de una noche de trabajo, se encuentra París totalmente vacío; desconcertado, explora las calles y descubre algunas personas paralizadas como si se hubieran quedado congeladas. Poco después, encuentra a un grupo de viajeros procedentes de Marsella que han llegado en avión esa mañana. Juntos, prosiguen la vana búsqueda de individuos en movimiento.
Comentario: El mérito de la trama (de René Clair, en su primera película) es que ninguno de los temas que ofrece a lo largo de una hora de metraje llega a saturar. Tanto la idea del hombre solo en una ciudad vacía (desarrollada décadas más tarde por Richard Matheson en una de sus novelas o por Rod Serling en su La dimensión desconocida (En los límites de la realidad) (Twlight Zone) como la de las luchas internas que surgen en el grupo de "sobrevivientes" (planteadas en pequeños filmes de clase B del sub-género "post-holocausto nuclear), están correctamente equilibradas y nunca dejan de provocar una sonrisa cómplice ante ese encanto, entre funambulesco y mágico.
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