Romances memorables del cine fantástico (XX): Más allá de los sueños

Más allá de los sueños (What Dreams May Come, 1998). Otra aparición del imprescindible Richard Matheson, aquí solo mentado como autor de la novela homónima que inspiró esta moderna versión de los mitos de Orpheo y Eurídice, llena de referencias a La divina comedia con un hombre en busca de su esposa en el infierno y el cielo. Chris Nielsen (Robin Williams) junto a su esposa Annie (Annabella Sciorra), viven una vida de ensueño con sus dos hijos, Marie e Ian Nielsen. Una mañana, mientras la nana de los niños los lleva camino a la escuela, en un auto conducido por ella, son embestidos por un auto conducido por un hombre ebrio, lo que termina con la vida de los niños. Después de la pérdida de sus dos hijos, Annie cae sumergida en una intensa depresión y es Chris quien la ayuda a salir de esta situación después de pasar por psicólogos y recorrer juntos un largo camino. Con el tiempo, es otro accidente de tráfico el que acaba con la vida de Chris y es Albert Lewis el encargado de guiarlo en sus primeros pasos por el cielo. Mientras tanto, después de la dolorosa pérdida de su esposo, Annie recae cada vez más en su depresión al no poder soportar quedarse sin sus seres queridos. Continúa al mismo tiempo el viaje de Chris por su particular cielo y conociendo a nuevos amigos, que después descubrirá que son sus hijos, ayudándole a recorrer el camino. Annie, completamente destrozada, no lo soporta más y decide suicidarse. Es entonces cuando Chris decide emprender la búsqueda de su mujer, pues los seres humanos que se suicidan son llevados al purgatorio. Allí, Chris encuentra a su mujer muy cambiada, fuera de sí, sin que le pueda reconocer. El tiempo se agota y tiene que salir de allí si no quiere acabar él también así, pero abandonará todo por quedarse junto a su mujer.