Cine para niños: "Away (2019)", un ensueño sin palabras para despertar la imaginación

En paisajes extrañamente hermosos, un niño es acechado por una criatura aterradora. Animación sin palabras, tan emocionante como poética. A partir de los 10 años.

Un joven está colgado de un árbol, suspendido de las correas de su paracaídas. A su alrededor se extiende una inmensidad fantástica, arenosa y desolada. Surge un monstruo, un gigante humanoide oscuro con el cuerpo ennegrecido, los ojos vacíos… ¿Dónde hemos terminado, en qué fabulosa pesadilla, qué región única del cine de animación? En la tierra de las extrañas maravillas de Gints Zilbalodis, el joven director letón que concibió la película por su cuenta. Sin diálogo. Casi ninguna historia: el joven huye, a pie, en moto, por una isla de paisajes cambiantes, de esplendor onírico. Pisándole los talones, la criatura gigantesca. Ella lo sigue, lenta, casi melancólica, pero inexorable como la muerte misma. Sin diálogo, casi sin historia y, sin embargo, la aventura es rica, emocionante y única.

Cierto aire a Chihiro

En esta persecución lineal - el joven ha encontrado un mapa y está tratando de llegar a un puerto lejano - el espacio se divide en capítulos sucesivos ("El oasis prohibido", "El lago espejo"...), como el niveles de un videojuego. Una referencia formal obvia: el camino está sembrado de arcos de piedra, que evocan esas etapas de progresión que todos los jugadores conocen bien. Y la decoración revela una textura digital casi "vintage", como un temblor frío en la imagen. Lejos de dañar la belleza de la película, esta aspereza virtual, unida a una animación más clásica y más fluida para los personajes (el monstruo, el humano y toda una fauna tierna y poética), añade a la imagen un toque extra. Una referencia formal evidente, un nuevo cambio de escenario. La influencia de la animación japonesa en general, y de Hayao Miyazaki en particular, es igualmente notoria: cómo no pensar, entre otras cosas, en el Sin Rostro del Viaje de Chihiro frente a las conmovedoras y perturbadoras formas del monstruo, que, tan hambriento como su modelo, absorbe toda la vida a su paso? ¿Qué representa él? ¿Ansiedad, destino, muerte, incluso contaminación? Como todas las grandes películas, esta Away es un espacio abierto a muchas interpretaciones, como las más libres, las más densas de las ensoñaciones.