El 13 de abril de 1973 se estrenó la película francesa Una dama y un bribón (La bonne année), dirigida por Claude Lelouch e interpretada por Lino Ventura, Françoise Fabian, Charles Gérard, André Falcon, Mireille Mathieu, Lilo, Claude Mann, Frédéric de Pasquale. Productora: Coproducción Francia-Italia; Les Films 13. Duración: 90 minutos.
Sinopsis argumental: Un permiso especial de año nuevo permite a Simon salir de la prisión por una noche. Han pasado seis años desde su captura y está deseando regresar a su apartamento y encontrarse con su novia. Sin decirle nada, queriendo darle una sorpresa, llega al hogar y comprueba que el sorprendido es él, pues, sin llegar a ser detectado, observa que su novia vive ahora con otro hombre. Decepcionado, decide marcharse. ¿Es esa la compensación que le espera por todos los sacrificios? Él siempre ha sido un hombre meticuloso y astuto. Cada golpe es planeado al detalle y su dedicación al objetivo es total. Bueno, no siempre. Cuando su colega Charlot y él viajan a Cannes para robar una famosa joyería, no puede evitar fijarse en la dependienta de la tienda de antigüedades de al lado y tomarse ese plan como si de un juego se tratara.
Nominaciones y premios: Premios BAFTA: Nominada a mejor música; Festival de San Sebastián: Mejor actor (Lino Ventura) y Mejor actriz (Françoise Fabian).
Comentario: Claude Lelouch, un realizador cuyo primer gran éxito lo consiguió con Un hombre y una mujer (ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cannes y el Oscar a la mejor película extranjera), volvió a dar en la diana comercial en 1972 con La aventura es la aventura, una historia sobre la amistad entre cinco bribones. Un año más tarde, decidió coger a dos de sus personajes (Charlot y Lino) y dedicarles una película que iba un poco más lejos y también hablaba sobre el amor. Para ello, volvió a confiar los roles a Lino Ventura y Charles Gérard, aunque en esta ocasión se verían acompañados de la bella Françoise Fabian. Como curiosidad, Una dama y un bribón -una cinta que entusiasmó a Stanley Kubrick- se financió gracias a la publicidad, particularmente de marcas como Van Cleef & Arpels. Se conmemora el quincuagésimo aniversario de su estreno.
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