Cumplió 25 años: Siempre queda el amor

El 29 de mayo de 1998 se estrenó la película estadounidense Siempre queda el amor (Hope Floats), dirigida por Forest Whitaker e interpretada por Sandra Bullock, Harry Connick Jr., Gena Rowlands, Mae Whitman, Michael Paré, Cameron Finley, Kathy Najimy, Bill Cobbs, Connie Ray, Rosanna Arquette. Productora: 20th Century Fox. Duración: 114 minutos.

Sinopsis argumental: Birdee Pruitt (Sandra Bullock) parece tenerlo todo: lleva años felizmente casada con el apuesto novio que se echó en el instituto, tiene una buena casa, y una hija despierta y sensible. Pero cuando su espléndida vida se desmorona a su alrededor, Birdee tendrá que comenzar de cero. Sin ningún otro lugar al que dirigirse, nuestra antigua reina de la belleza, acompañada de su hija Bernice (Mae Whitman) toma de nuevo el camino de Smithville (Texas), su hogar. Allí todo se le complica aún más. Tendrá que lidiar con una madre (Gena Rowlands), a la que, en realidad, ha de empezar a conocer ahora; ocuparse de una hija que añora desesperadamente a su padre; y enfrentarse a la perspectiva de volverse a enamorar. Pero a medida que Birdee, dominada por el desasosiego, emprende su nuevo camino, empezará a encontrar las fuerzas que necesita para reconstruir su vida.

Comentario: Romántica y lacrimógena película a cargo de Forest Whitaker, quien ya probó fortuna en este campo con Esperando un respiro. Sandra Bullock, que produce y protagoniza la película, señala que "hoy en día existen muchos problemas de comunicación, sobre todo entre padres e hijos. Pero lo que no hace falta es acudir a televisión, ante millones de personas, para explicar a tu mujer por qué te has acostado con la canguro". la cinta, al tratar el drama de la separación conyugal, abandona muchos manidos clichés al no obviar la cuestión de qué pasa con el resto de la familia. Incluso un nuevo romance llena de confusión a Birdie, y no se presenta como "solución fácil". Bullock, estupenda, insufla una adecuada fragilidad a su personaje. La escena de su borrachera en el cuarto de baño es de gran intensidad. Le dan réplica estupendos actores: Harry Connick Jr., la pequeña Mae Whitman y, sobre todo, la veterana Gena Rowlands, espléndida como madre con experiencia. La música romántica de Dave Grusin y la fotografía radiante de dorados de Caleb Deschanel dan a la película un aire muy especial.