Biografías de cine: William Powell (III)

(cont.)

- Encrucijada (Crossroads, 1943), de Jack Conway, con Hedy Lamarr. Discreta intriga psicológica sobre un personaje que ha sufrido amnesia, realizada por un interesante director en una época proclive para este tipo de thrillers, que contó con un reparto de lujo. Es el primer remake de la película francesa Carrefour, de Curtis Bernhardt. Se ambienta en Francia en 1935.

Hedy Lamarr y William Powell en Encrucijada (1942)

- Recursos de mujer (Life with Father, 1947), de Michael Curtiz, con  Irene Dunne,  y Elizabeth Taylor. Una deliciosa comedia basada en un éxito teatral de Broadway y dirigida con acierto por ese todoterreno impecable que fue Michael Curtiz. Fue nominada a los Oscar a mejor actor (William Powell), música, fotografía y dirección artística en la edición de 1948 de estos premios. Una cinta impecable en todos los aspectos, ideal para ver en familia.

Irene Dunne y William Powell en Recursos de mujer (1947)

- Un paso en falso (Take One False Step, 1949), de Chester Erskine. Producción de bajo presupuesto basada en una historia escrita por los hermanos David e Irwin Shaw, con guión de éste último. Una trama bastante convencional sobre el hombre inocente perseguido injustamente, donde destacan algunos nombres en su reparto como los de Shelley Winters –todavía no muy conocida, y en uno de sus primeros papeles protagonistas–, William Powell y el secundario especialista en comedias James Gleason (candidato al Oscar por El difunto protesta). Un hombre de mediana edad conoce a una joven muchacha con la que traba una buena amistad, a pesar de que sus intenciones no están muy claras. De repente, la chica aparece asesinada y él es considerado el primer sospechoso.

- El tesoro de Lost Canyon (The Treasure of Lost Canyon, 1952), de Ted Tetzlaff. Agradable adaptación cinematográfica de un corto relato literario de Robert Louis Stevenson, responsable de las historias fantásticas y de aventuras La isla del tesoro, El extraño caso del doctor Jekyll y míster Hyde o La flecha negra. Se trata de una de las producciones que realizó Ted Tetzlaff después de retirarse de su carrera como director de fotografía. Con un reparto encabezado por William Powell lo más destacable es el apartado visual, que ensalza los ya bellos parajes del californiano McArthur-Burney Falls Memorial State Park. Y es que es un trabajo de Russell Metty, un artesano que ganó un Oscar gracias a Espartaco y que firmó la fotografía de cintas como Sed de mal, La fiera de mi niña o Imitación a la vida. 

- Cómo casarse con un millonario (How to Marry a Millionaire, 1953), de Jean Negulesco.  Hilarante comedia repleta de antológicas secuencias de humor y con un toque romántico que le convierten en uno de los mejores filmes de Jean Negulesco, que pasaba por ser el realizador que mejor dirigía a las actrices en Hollywood. Así lo demostró en esta ocasión con tres de los nombres más reputados: Marilyn Monroe, Lauren Bacall y Betty Grable. Asimismo consigue un ritmo muy ligero de modo que la acción se desarrolla muy rápido.

William Powell, Lauren Bacall, Betty Grable y Marilyn Monroe en Como casarse con un millonario (1953)

Su última película Escala en Hawaii (Mister Roberts, 1955), dirigida por John Ford, Mervyn LeRoy, con Henry Fonda, James Cagney y Jack Lemmon. Se basa en la obra teatral escrita por Thomas Heggen y Joshua Logan. La película narra las relaciones y conflictos personales que surgen entre los miembros de la tripulación de un barco que, durante la Segunda Guerra Mundial, transporta mercancías de un lugar a otro sin entrar directamente en el conflicto; lo cual no es del agrado de todos, pues muchos querrían participar en la lucha. Cuenta con un reparto increíble de actores, entre los que hay que destacar a un veterano James Cagney (alejado aquí de sus caracterizaciones como gángster que tanta fama le dieron en Al Rojo Vivo, Ángeles con caras sucias...), Henry Fonda, William Powell y Jack Lemmon, que ganó el Oscar en la categoría de mejor actor secundario. Apoyándose en tales intérpretes, Ford elabora un memorable melodrama protagonizado exclusivamente por hombres, al que imprime su sello personal.

En 1963, William Powell decidió retirarse del mundo del cine y se trasladó a vivir con su esposa, la también actriz Diana Lewis, a Palm Springs, donde residió hasta su muerte el 5 de marzo de 1984, a la edad de 91 años debido a un paro cardíaco.