Un viaje por la filmografía de Nanni Moretti (II)

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7. Vaselina roja (Palombella rossa, 1989)

A causa de un accidente, Michele, jugador de waterpolo, pierde la memoria. Durante un partido, unos desconocidos empiezan presionarlo con el fin de que recuerde su pasado. Cuando el partido está a punto de acabar, Michele se dispone a lanzar un penalti del que depende el empate para su equipo. Una reflexión sobre la crisis de la izquierda italiana, y muy especialmente del PCI, planteada como una parábola cuyo detonante es una agitada partida de waterpolo. Se desarrolla a través de una serie de resortes simbolistas que revelan un evidente ingenio pese a alguna caida en lo fácil. El conjunto resulta atractivo, pero no siempre mantiene la debida coherencia.

Nanni Moretti en Vaselina roja (1989)

8. Querido diario (Caro diario, 1993)

Película dividida en tres episodios, que refleja la vida y opiniones de Nanni Moretti. En mi Vespa es una aproximación a la vida cotidiana de Roma durante el mes de agosto; en Islas visita a Gerardo, un amigo que lleva once años viviendo en Lipari; juntos recorren otras islas como Salina, Stromboli, Panarea y Alicudi. En Médicos el director rueda su propia quimioterapia y su recorrido por hospitales y especialistas incapaces de diagnosticarle la causa de unos insoportables picores. Película en tono de comedia y con un estilo próximo al documental. Participó en la selección oficial del Festival de Cannes de 1994, donde Nanni Moretti recibió el premio al mejor director y el David di Donatello a la mejor película. 

 Nanni Moretti en Querido diario (1993)

9. Abril (Aprile, 1998)

Nanni Moretti realiza un experimento cinematográfico en la línea de Querido Diario con esta curiosa mezcla de comedia y documental sobre sí mismo. El cineasta analiza su forma de ser, su relación con sus amigos y familiares así como sus dudas, pensamientos y miedos, y su visión particular del cine. Destaca la ironía que impregna cada fotograma y la crítica social y política que el director vislumbra a lo largo del metraje.

Nanni Moretti en Aprile (1998)

10. La habitación del hijo (La stanza del figlio, 2001) 

Una familia feliz. El padre, la madre, los dos hijos adolescentes, chico y chica. Se llevan bien. Apenas hay conflictos. Hasta que un día… el padre, que es psicoanalista, debe acudir a ver a un paciente. No podrá salir con su hijo Andrea, que aprovecha para ir a bucear con sus amigos. Será su última inmersión. El chaval muere, y todos se derrumban. ¿Hay un sentido en esa muerte? ¿Es posible superarla? ¿Por qué tanto dolor? Surgen mil y una dudas: “si no hubiera ido a ver a ese tipo, que encima no quería nada”, “debería haber estado más tiempo con él”, “hablar más”… Nanni Moretti ganó la Palma de Oro en Cannes con este drama que habla del vacío que puede dejar la muerte. Sentimientos de culpa, dificultad para reanudar la vida ordinaria, e incluso el silencio de Dios, forman parte de una película que llega a todo espectador, y que provoca un nudo en la garganta. Hasta el desenlace, un prodigio en su simplicidad, que nos permite tomar aire tras pasar casi cien minutos con la respiración contenida.

Nanni Moretti y Giuseppe Sanfelice en La habitación del hijo (2001)

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