Una mujer soltera algo torpe se convierte en dama de honor de la emperatriz de Austria... y se enamora de ella. Con Sandra Hüller, sigue siendo impresionante.
¿Cómo se llamó Sissi? Lejos de las obras con volantes de Ernst Marischka (entre 1955 y 1957) y del drama crepuscular de Luchino Visconti (1973) que la canonizó bajo la apariencia de Romy Schneider, la emperatriz de Austria inspira hoy relecturas audazmente feministas. Después del estreno de la austriaca Marie Kreutzer y su película La emperatriz rebelde (Corsage) a finales de 2022, le toca a la alemana Frauke Finsterwalder hacerla lucir un atuendo anacrónico a través de una ficción reivindicada como tal, Sisi & I (Sisi & Ich, 2023). Entre sus puntos comunes, estas dos películas bordan libremente la muerte de la alteza asesinada por un anarquista italiano en 1898, contemplando la muerte.
La película narra la vida de la emperatriz Sisi de Austria desde el punto de vista de su dama de honor, Irma. Sisi viajó por toda Europa, dominó seis idiomas, practicó deportes de alto rendimiento y no encajaba para nada en el ajustado corsé de la corte vienesa.
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