Presentada en el Festival de Cannes, fuera de competición, la quinta entrega de la saga de George Miller explora los orígenes de la sed de venganza de la heroína descubierta bajo la apariencia de Charlize Theron en Mad Max: Furia en la carretera y golpea fuerte.
"Nada de sentimentalismos”, había advertido Dementus (Chris Hemsworth) antes del descuartizamiento de un prisionero mediante cinco motocicletas. La compasión, sincera o falsa, no se encuentra en esta de saga apocalíptica y explosiva de George Miller. En la cálida Australia, nadie quiere oír gritar a los niños. Luego se transforman en guerreros.
Al final de Mad Max: Furia en la carretera (Mad Max: Fury Road, 2015), la entrega anterior, Furiosa logró retomar la Ciudadela y eliminar al tirano con la cara devorada por un respirador. ¿Qué sería lo próximo? Siendo el futuro lo que es, una carrera en toda regla hacia el muro de un mundo condenado a la implosión...
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