Metro-Goldwin-Mayer cumple 100 años (XXI)

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• La gran evasión (The Great Escape, 1963), de John Sturges. John Sturges trasladó magistralmente a la pantalla esta emocionante historia basada en un hecho real y escrita por un prisionero de guerra que se fugó de un campo nazi durante la Segunda Guerra Mundial. El director contó con varios actores que ya trabajaron con él en Los siete magníficos, como James Coburn, Charles Bronson y Steve McQeen, que puso como única condición que su personaje escapara a lomos de una motocicleta. Otros prisioneros del campo fueron interpretados por Richard Attenborough, el jefe de la organización; James Garner, el encargado de aprovisionamientos; y Donald Pleasence, especialista en falsificación de documentos.

• El noviazgo del padre de Eddie (The Courtship of Eddie's Father, 1963), de Vincente Minnelli. Inteligente adaptación de una novela de Mark Toy, dirigida con elegancia por un Vincente Minnelli que, pese a ello, tendió a exagerar un poco tanto las escenas dramáticas como las cómicas. Aún así, el veterano maestro se las apañó para extraer lo mejor de su excelente reparto, en el que un entrañable Glenn Ford se vio rodeado por candidatas a esposa tan cualificadas como Dina Merrill, Stella Stevens y Shirley Jones. Ronnie Howard, el niño protagonista, se convertiría con los años en uno de los directores más taquilleros de Hollywood, con títulos a sus espaldas del calibre de Cocoon, Rescate o Apolo 13. Tres años después, dio pie a una serie de TV, protagonizada por Bill Bixby.

• La mansión encantada (The Haunting, 1963), de Robert Wise. Considerada una de las mejores películas de terror y se podría decir, pionera del miedo psicológico que tuvo un remake en 1999 con The Haunting (La guarida). Protagoniza Julie Harris y está dirigida por Robert Wise, que fue nominado a los Globos de Oro. La película adapta la novela de Shirley Jackson, un clásico del género de terror, y aprovecha magníficos escenarios como el de la escalera de caracol que preside la biblioteca, y un gran reparto donde destacan también Claire Bloom, Fay Compton o Lois Maxwell.

• Cita en Las Vegas, también conocida como Viva Las Vegas (Viva Las Vegas, 1964), de George Sidney. Comedia musical al servicio de Elvis Presley, que en aquellos momentos estaba en la cumbre de su éxito. Contiene todos los ingredientes típicos de las películas de Presley: chicas guapas, peleas, parajes exóticos, y como no, muchas de sus canciones. En esta ocasión, pero, la película trasciende un poco del típico esquema de musical con cantante incluido gracias al buen hacer del director George Sidney, un experto en el género. Elvis está aquí acompañado de Ann-Margret, sin duda la mejor oponente femenina que nunca ha tenido en una película y que aquí incluso canta algunos temas musicales con él.

• La americanización de Emily (The Americanization of Emily, 1964), de Arthur Hiller. Una comedia dramática, ambientada durante la II Guerra Mundial, y que ofrece una visión realista e incluso algo cínica de las relaciones entre los soldados americanos y las mujeres inglesas durante los preparativos de la invasión de Europa (un tema que ha dado pie a otros filmes, como Yankees o La calle del adiós”. Su director, el canadiense Arthur Hiller, es el responsable de otros títulos románticos, como Love Story o Su otro amor.

• Molly Brown siempre a flote (The Unsinkable Molly Brown, 1964), de Charles Walters. Molly Brown fue un personaje real de la alta sociedad americana, que se hizo famosa a principios de siglo por haber sobrevivido al hundimiento del Titanic (lo que le valió el sobrenombre de Insumergible). Su vida inspiró una obra musical, que triunfó en los escenarios de Broadway, protagonizada por Debbie Reynolds y Harve Presnell, antes de ser llevada a la pantalla. La pareja repitió en la adaptación para el cine, que le proporcionó a ella una merecida nominación al Oscar (perdió frente a Julie Andrews en Mary Poppins). La cinta fue también la penúltima dirigida por Charles Walters, uno de los más consumados directores del género musical del Hollywood de los años dorados.

• El rey del juego (The Cincinnati Kid, 1965), de Norman Jewison. Una película  originalmente ofrecida a Sam Peckinpah y del que fue despedido por desavenencias creativas con los productores. Le reemplazó el canadiense Norman Jewison, un realizador todoterreno que consiguió con ella una de las más recordadas películas sobre el juego y las relaciones entre los personajes que se mueven en este submundo. Excelente plantel de secundarios entre los que destacan Edward G.Robinson, Karl Malden, Joan Blondell, Tuesday Weld y una seductora y pérfida Ann-Margret.

• Doctor Zhivago (1965), dirigida por David Lean. Espectacular adaptación de la novela homónima de Borís Pasternak, rodada por David Lean tras su magistral Lawrence de Arabia y con parte del equipo de esta, entre ellos el actor Omar Sharif y el compositor Maurice Jarre. Este último ganó un Oscar por la banda sonora de la película, en la que destaca el inolvidable Tema de Lara. La cinta fue candidata a otras diez estatuillas y ganó cinco más, aunque casi todas en categorías menores (guion adaptado, fotografía en color, decoración en color y vestuario en color). Curiosamente, su protagonista femenina, Julie Christie, también ganó un Oscar en esa edición, pero no por esta película, sino por Darling. Buena parte de la película se rodó en España y se dice que en una escena donde los extras cantaban La internacional, la policía secreta se infiltró entre ellos para descubrir quién conocía la letra.

• Blow-Up (Deseo de una mañana de verano) (Blow-Up, 1966), de Michelangelo Antonioni. Blow-Up (Deseo de una mañana de verano) forma parte de las obras de culto de los años 60 y fue dirigida por Michelangelo Antonioni, uno de los estandartes del cine de autor europeo. A pesar de haber sido nominada al Oscar en la categoría de mejor guión original, la película está basada en un relato de Julio Cortázar. En el momento de su estreno, la película tuvo una gran repercusión, alzándose con la Palma de Oro en el festival de Cannes y sirviéndole a Antonioni para recibir una candidatura al Oscar a la mejor dirección.

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