El sexto sentido (The Sixth Sense), de M. Night Shyamalan
Por qué es importante: Con su tercera película M. Night Shyamalan fue la segunda película más taquillera de 1999 en todo el mundo y se ha convertido en el ejemplo perfecto de los finales inesperados. Su influencia es duradera («Veo gente muerta» es una de las frases más reconocibles de Hollywood) y Shyamalan ha hecho carrera a base de despistar al público cinematográfico.
Bruce Willis y Haley Joel Osment en El sexto sentido |
Cómo se sostiene: Realmente depende de si piensas que el final mejora lo que vino antes o lo convierte en una película única. Las actuaciones siguen siendo de primera categoría, en particular la de Toni Collette, que le valió una nominación al Oscar.
Qué ver a continuación: Los otros, de Alejandro Amenábar, con Nicole Kidman se estrenó dos años después y se mantiene como una inquietante historia gótica de fantasmas. Para una versión más profunda, echa un vistazo a El espinazo del diablo (2001), de Guillermo del Toro.
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